
El tiempo que no se detiene por nada ni nadie.
Surcos, arañazos, cicatrices, manchas, …y tiempo.
Sí, nuestra piel va marcada por ese incesante tiempo, por nuestras vivencias, experiencias desalentadoras e ilusionantes. las ojeras por las noches de tristeza o de fiesta, las marcas que el reloj esculpe en nuestro rostro. Nuestra piel es el reflejo de una vida cargada de momentos dulces y amargos, unas veces para ganar … y otras para aprender.
Las arrugas de tu cara son el reflejo de nuestras emociones
Nuestro cuerpo transmite constantemente información sensible sobre nuestras intenciones, sentimientos y personalidad. Incluso cuando estamos quietos o en silencio, los gestos, las posturas, las expresiones faciales y la apariencia hablan por nosotros.
Por ello, Emocosmética, en su centro de investigación permanente, ha creado el Ritual de belleza Emocional “…Borrando las Huellas del Pasado” donde matizaremos manchas e imperfecciones para afrontar de nuevo la vida, con nuestro lienzo en blanco, suabizando las huellas indeseadas que forman parte del recuerdo y haremos que no formen parte de nuestro presente.
Nacido de la fusión del trabajo de diversas técnicas como, por ejemplo: fitoterapia, aromaterapia, cromoterapia, peeling naturales, trabajo con activos de bambú, ingredientes equilibrantes de los melanocitos, además de técnicas nacidas de la psicomorfología del rostro y de la reflexología facial. Este ritual predispone la piel para la recuperación de su equilibrio natural; y favorecer así, una regeneración poderosa, eficiente y duradera.
El tratamiento de Belleza Emocional
“…Borrando las Huellas del Pasado” es un nuevo concepto de ritual de belleza integral que logra innumerables beneficios. Entre ellos, podemos destacar que:
- Logra minimizar la visibilidad de las manchas e imperfecciones en la piel, principalmente en el rostro, aunque es apto para cualquier zona del cuerpo.
- Recupera la flacidez facial.
- Fomenta la producción de elastina y colágeno, mejorando el metabolismo de la piel.
- Induce a la regeneración de la superficie cutánea, eliminando lesiones pigmentarias, imperfecciones y arrugas superficiales.
- El rostro muestre una piel tersa, sana y luminosa.
- Regula la producción sebácea, la hidratación y la producción de melanina.
- Equilibra el estado de ánimo y localiza las emociones causantes de los desajustes pigmentarios.
- Aumenta la autoestima.